Leo esta semana “Héroes 2. La historia secreta de Chile”, de Jorge Baradit. Por supuesto, es ironía fina decir que algo es secreto si se publica. Al mismo tiempo atrae e intriga.
A propósito de misterio, pensé en contarles resumidamente la historia de mi primer libro. La foto que ilustra esta nota es del último y único ejemplar que me queda. Me gusta su talante rugoso y avejentado. En realidad, es de mi hija mayor, a quien se lo dediqué hace como 25 años. Pero me deja tenerlo.
Crónica de papeles
…Te imagino a veces, cuando descienden las horas a su estado primitivo, cuando el silencio desata su ropaje oscuro y se echa sobre los minutos haciéndolos largos, interminables.
De la prosa “Distancia”, Impresiones, Benjamín Parra, 1993
Este es un fragmento del escrito más antiguo del que tengo registro en papel. Lo debo haber escrito en el invierno de 1978. Después de cuatro décadas, conserva intacto el sentimiento de una época difícil pero llena de esperanzas.
Tengo en alguna parte de Chile, que ya no recuerdo, una carpeta donde hay decenas de papeles de todos tipos, formas y colores.
Representan la historia secreta, al menos en parte, de cómo se fue formando este primer libro.
El éxtasis, la agonía y… el éxtasis
Lograr convertir todo ese montón de papeles en un original diagramado, con portada y fotografía del autor fue una odisea. Un pasaje inolvidable de mi experiencia literaria.
Recuerdo innumerables horas con mi amigo Polo González, sentados frente a la computadora, diseñando todo con Page Maker, bisabuelo de los programas gráficos actuales.
Después, había que llevarlo a la imprenta. Era necesario hacer mínimo 1000 ejemplares por la naturaleza del sistema de impresión y los costos asociados. Sacar dinero de donde no había, pedir prestado, empeñar la vida para pagarlo, forma otro capítulo de la historia secreta de “Impresiones“.
Nunca olvidaré la mañana en que me entregaron, como anticipo, 20 ejemplares. Esperé a estar sentado en el metro para abrir con gran emoción el paquete. Constaté, con horror, impresentables fallas de impresión, de encuadernación y de color.
Lloré en silencio. Con pena. Con rabia. ¿Por qué tenía que ser tan difícil?
Todo pasa
Al fin, logré rescatar 500 ejemplares. La imprenta entró en bancarrota y perdí 500 libros. Siempre me hace gracia imaginar que, reciclados, se convirtieron en papel para el baño o la cocina.
Tardé varios años en vender esos ejemplares. El de la foto es el literalmente el último que nos queda.
No hay registro digital de la obra, así que la estoy transcribiendo en la computadora para volver a publicarla, esta vez en formato PDF.
Luego vinieron Imprecisiones, Palabra Lateral y La Palabra en su Laberinto. Eran otros tiempos, menos difíciles, menos peligrosos. Pero la pasión por escribir, y ahora publicar, sigue viva.
Esta es la historia secreta de mi primer libro.
. . .
¿Tienes papeles escritos, registros digitales que quisieras convertir en un libro? Te puedo acompañar en el proceso de editarlos para que no sea una historia secreta tan doliente como “Impresiones”...
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
2 respuestas
Jorge, Jorge Baradit
Gracias por la observación. Ya está corregido!