En la Biblia encontramos muchos milagros de parte de Jesús. Uno de ellos es impresionante por la gran cantidad de personas que fueron beneficiadas. Me refiero a la alimentación de los cinco mil hombres sin contar mujeres y niños. Era una gran multitud que seguía a Jesús, pero ellos ¿realmente buscaban conocer más a Dios o sólo lo seguían para obtener algo de Él?
El Maestro sanó enfermos, liberó endemoniados, proveyó alimento, resucitó muertos; realmente muchas personas fueron ayudadas por Él. Pero sólo 120 seguidores se reunieron en Jerusalén para recibir al Espíritu Santo como Jesús les había mandado. De miles de personas solamente 120 realmente creyeron y obedecieron al Señor.
¿Actualmente, sucede algo parecido? Lamentablemente sí, muchos buscan a Dios para recibir algo de Él y no con la intención de comprometerse y seguir su camino. Por esta razón, me gustaría desglosar las características de las personas que realmente aman a Dios y desean conocerlo. Lo podemos encontrar en este pasaje:
El propósito de mi instrucción es que todos los creyentes sean llenos del amor que brota de un corazón puro, de una conciencia limpia y de una fe sincera
1 Timoteo 1:5 (NTV).
En el corazón se encuentra el origen de los deseos e intenciones. Esta característica se refiere a la persona que ha decidido ser apartada para Dios. Indica que el individuo ha sido regenerado, limpiado y guarda su vida para mantener una relación continua con el Señor.
La conciencia evalúa y controla los deseos e intenciones que tenemos, con la finalidad de promover una conducta y actitud de acuerdo con determinadas normas. Entonces, una persona con buena conciencia es el resultado de un corazón renovado, el cual permite tomar decisiones moralmente buenas, conforme a lo establecido por Dios.
Es una fe sin hipocresía, esta característica produce en la persona un compromiso auténtico, que le induce a nutrirse de la sana doctrina como también a reflejar una conducta acorde a lo que cree.
Si has estado flaqueando en algunas de las características mencionadas, te animo a volver a los pies de Cristo, y a que renueves tu compromiso con Él. Dios no rechaza a quien reconoce sus faltas, más bien los recibe con los brazos abiertos.
El siguiente crédito, por obligación, es requerido para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
La licenciada Débora Pedace nos habla de 6 pasos para el autoperdón, la importancia de…
Mientras vivimos en una sociedad que valora las apariencias, Dios nos llama a enfocarnos en…
Como mujer se te puede hacer difícil manejar tu vida y hoy te traemos cinco…
¿Qué significa esperar en Dios? Confiar en Él, en Sus promesas y Su tiempo perfecto.…
Como cristianos, uno de nuestros mayores llamados es ser transformados a la imagen de Cristo.…
El Buen Pastor, Jesús, no te dejará y por más lejos que te encuentres, te…