El corazón alegre hermosea el rostro; Mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.
Proverbios 15:13 (RVR 1960).
Generalmente las personas mayores tienen un rostro cansado, pero también hay gente joven que se ve de bajo semblante, y es que, no solo lo físico hace que uno se vea mayor o joven, sino también la condición de su corazón.
Una alegría diferente
El rostro es el reflejo de un corazón contento o triste, y pese a que la alegría puede ser fugaz, la Biblia nos habla de aquella que permanece: el gozo, que es una alegría y paz constante que no depende de las circunstancias solamente, sino que se sujeta a Dios, a su deidad, a su poder y a su obra redentora a través de Cristo.
Buscamos estar alegres, y aunque en el mundo hay bastantes cosas que prometen dar aquello que anhelamos para estar contentos, solo el amor y misericordia de Dios nos da la alegría permanente y verdadera.
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Mateo 6:33 (RVR 1960).
¿Es imposible?
No podemos evitar los problemas y desazones de la vida, pero sí podemos evitar estar amargados por ello, puesto que nuestra confianza y esperanza está en Cristo, quien es el que nos da la redención y la vida eterna. ¿Qué más necesitamos para tener paz y gozo?
Aunque no es fácil, esforcémonos en mantener nuestro corazón alegre en medio de las aflicciones, y lo lograremos con una comunión sincera y permanente con Dios, ¡esta es la clave!
Que todos se den cuenta que el motivo de nuestra alegría es Jesús.
Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.
Nehemías 8:10 (RVR 1960).
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