Cuando enfrentamos un momento difícil y complicado es muy común escuchar: ¿Dónde está Dios? ¿Por qué me pasa esto a mí? ¿Si soy su hijo, por qué permite que sufra? Todos queremos una respuesta inmediata y una solución pronta. Pero, ¿qué dice la Biblia sobre el sufrimiento?
El sufrimiento es universal, en algún momento de la vida todos experimentaremos el dolor. Jesús y los discípulos también sufrieron. Y no necesariamente el sufrimiento es por causa de nuestro propio pecado o falta de fe.
La Biblia nos muestra que todos sufrimos, aun los justos. Por lo tanto, es importante saber que nada sucede por casualidad. Hay un plan para todo.
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Romanos 8:28-29 (RVR 1960).
Cuando algo malo nos sucede hay dos salidas: la primera, puedes quedarte ahí cuestionando a Dios, enojarte con Él y luego alejarte. La segunda, puedes tomar ese sufrimiento como una escuela para formar tu carácter y acercarte más a Dios.
No hay un evangelio fácil y sin dolor como muchos enseñan, por esa razón, Jesús dijo que en el mundo tendremos aflicción, pero también dijo que estemos tranquilos que Él jamás nos abandonará. Siempre está a nuestro lado.
…y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Mateo 28:20 (RVR 1960).
Lo importante no es cuestionar a Dios, recuerda que todo nos ayuda a bien y que Dios no nos abandona. Por lo tanto, el sufrimiento no es una oportunidad para quejarse, sino para aprender y crecer.
De modo que, si sufren de la manera que agrada a Dios, sigan haciendo lo correcto y confíenle su vida a Dios, quien los creó, pues él nunca les fallará.
1 Pedro 4:19 (NTV).
Dependamos de Dios y no de nosotros mismos. Tomemos el sufrimiento como una escuela para consolar a otros y después de que pasemos el dolor, el Señor nos restaurará, fortalecerá y nos afirmará sobre un fundamento sólido.
El siguiente crédito, por obligación, se requiere para su uso por otras fuentes: Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
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